Bueno, pues me animo yo a dar mi opinión ...
Para los Phelsuma grandis, que comparten la mitad de los fluorescentes del camaleón (es un mueble de 1,20m dividido por la mitad) tengo un 2.0 y un 5.0. Lo cierto es que cuanto más UVB, menos ilumina el fluorescente, y peor se ve el terrario, así que un 2.0 para completar el 5.0 da muy buena luz, blanca como el sol.
Para los otros terrarios, que son de 30 cm de ancho, tengo puesta una pantalla de dos fluorescentes que abarca todos por encima, con la misma iluminación (un 5.0 y un 2.0 más que otra cosa para que no se vea una luz tan azul y fría). En todos los terrarios los bambús para tomar el sol están a no más de 5 cm del techo y la pantalla está por encima de los terrarios, que tienen una rejilla superior, pero salvo en el caso de los grandis, es muy fina y cerrada (1mm) e inoxidable, para evitar que escapen las drosofilas que les doy para comer. Así que como la cantidad de luz que la atraviesa es limitada, por eso tengo tan cerca los bambús de ella, para que les llegue algo de UV al menos.
Los terrarios de las crías son los de Exoterra de 30x30x30 con la rejilla metálica sustituida por la inoxidable más fina, y todos tiene muy buena luz, una bombilla compacta de 26W, uno de ellos tiene un 5.0 y el otro un 10.0 pero ya usado (más de 10 meses), es el que le cambio a la tortuga, y que vendrá a ser más o menos como el otro, digo yo.
Lo que es curioso es que los geckitos no gustan de asolarse como sus padres ... pero por lo que he leído en un libro bastan pocas horas para que tomen el UV necesario.
Lo importante más bien es que las zonas de asolamiento no estén más lejos de 15cm del fluorescente, porque según aumenta la distancia, la cantidad de UV perdida es muchísima ...
Un saludo!