Buenas,
Hace poco que tengo el último libro de Stefan y en él habla largo y tendido sobre estas granjas que él tanto ha visitado y da una visión de primera mano.
Os dejo parte de lo que comenta el libro sobre éstas,
Según comenta Stefan estas granjas aparecen a principios de los noventa:
En 1991 se capturaban machos y hembras en proporción 1:2 / 1:3 con el fin de criar en cautividad siendo estas capturas efectuadas en época de apareamiento entre octubre y noviembre.
Los ejemplares se mantenían conjuntamente y fue tarea fácil el proceso de cría. El apareamiento, las puestas y la posterior incubación no les supusieron problema alguno pero se vieron incapaces de alimentar a estos ejemplares adultos que con el paso del tiempo se debilitaban. Por estos motivos se vieron obligados a ceder estos ejemplares capturados al departamento de vida salvaje de Ghana que posteriormente reintroduciría en el medio.
En 1993 en un proyecto conjunto entre CITES y el gobierno de Ghana se reiniciaron estas granjas permitiendo unas cuotas de captura de hembras grávidas, estas realizarían sus puestas en las granjas y posteriormente serían reintroducidas por el departamento de vida salvaje.
1995, se realizaron las primeras inspecciones a los diferentes exportadores y se fijaron unas cuotas anuales que les permitirían obtener y exportar un total de 20.000 crías.
Esta cifra se calculó en base a las 3,540 hembras grávidas que les permitían capturar de forma temporal, hasta la puesta, y estando obligados a reintroducir en su medio el 10% de las crías obtenidas.
1997, CITES en colaboración con científicos de la Universidad de Kumasi y miembros de Ghana wildlife evalúa la praxis de estas granjas a la par que realiza un estudio sobre el impacto de éstas sobre las poblaciones salvajes.
Durante la evaluación se delimitaron zonas donde se realizaron capturas, los resultados extrapolados a todas las áreas susceptibles de ser hábitat natural estimaban una población total de 6-18 millones de ejemplares. La proporción de machos y hembras era de2:1 a favor de machos.
La proporción de hembras grábidas también fue estudiada a partir de ahí estimaron 11-32 millones de huevos fértiles por año que traducido en crías serían 9-13 millones estudiando variables como huevos infértiles y predadores.
Con esos resultados CITES consideró mínimo el impacto a las poblaciones las 3.500 capturas de hembras grávidas permitidas e invalidaron la normativa que les obligaba a reintroducir el 10% de la descendencia obtenida. (las hembras sí debían de ser reintroducidas) Pero debían destinar parte de esos ingresos extra a proyectos de conservación.
A día de hoy según comenta Stefan el modus operanding sigue siendo el mismo pero empiezan a no ser rentables.