Txemalopez
Well-Known Member
Ya haremos un relato menos familiar, pero estas son mis impresiones de la jornada 2010 de Soheva que tuve el gusto de co-coordinar con Manuel Merchán, de Chelonia. Este tipo de jornadas ("Tagungs", en Alemania), son el mejor indicativo de la salud de la afición. En Alemania, los encuentros de la DGHT juntan a personas de toda Alemania para hablar, exponer y debatir sobre muchos temas, y éste es el espíritu de las jornadas de SOHEVA, charlas (12 en total en esta ocasión), seguidas de sus 15-20 minutos de debate, muy participativas, donde el papel del público y los ponentes se confunde maravillosamente para dar lugar a discusiones de altísimo nivel. Si las ferias ya se van asentando tras 5 años, desde la primera "Expoterraqua" de Barcelona hasta la última "Terrasur", desde SOHEVA hemos apostado por la otra vertiente. Desde diciembre de 2008 nos hemos propuesto que estos "Tagungs" donde mezclamos "aficionados" con "profesionales" sea algo habitual en nuestro país.
Contamos con asistentes de varias partes de España (recuerdo gente de Jaén, Madrid, Barcelona, Tarragona...) e incluso de Francia e Italia, ya que el elenco de conferenciantes no es fácil de ver incluso en los "Tagung" alemanes. Y en todo momento, pudimos intercambiar toda clase de experiencias, durante 48 horas y de forma muy intensa, con alguno de los mejores especialistas del continente europeo.
Bueno, pues allá vamos. La cosa empezó movidita, porque Andrea Franzoi acabó el viernes hospitalizado, y puesto que Andrea Luison tenía un problema laboral grave e incompatible con la jornada (su jefe lo había mandado una semana fuera), hubo que sustituir las dos charlas. Una de ellas se cambió por una de marinas el domingo, pero la de Franzoi, que era la que abría las jornadas, tuvimos que cambiarla por un conferenciante que estuviese a mano y fuera barato... pues yo mismo. Previamente, hay que decir que algunos conferenciantes ya llevaban por aquí desde las 4 de la tarde del viernes, por lo que ya llevábamos unas horas de vuelo que explican mi cara a la hora de dar la charla y que el micrófono estuviese más tiempo en el suelo que en mi mano.
Harald Artner y yo nos pasamos una tarde turística por Valencia, puesto que su hijo es un fan de la Fórmula 1 y él del tenis, me los llevé a ver la sede del Open 500 y el circuito Urbano, en especial el puente que cierra la bocana del puerto. Esas cosas de las que los oriundos nos pasamos echando pestes dia y noche porque se gastan los duros en eso en vez de en tenr buenos servicios, pero bueno, esto es así desde la época de los faraones y yo por poco lloro en la puerta de Abu Simbel. Pero a las 9 aparecimos todos en el Restaurante "El Pederniz", y estuvimos hasta la 1:30 pasándolo bomba, el dr. Artner, Agostino Montalti y Daniella, Filippo y Simona, Santos, Johnny, Jordi, Clara, Salva, Lola, Miguel Ángel Rivera, Miguel Ángel Ordovás, y un servidor, salimos doblados por todas partes. Me llevo a todo el mundo al hotel, paso a recoger a la 8 de la mañana siguiente, un frio que pela. Entramos, nos sentamos y empezamos las charlas, con el café calentito recién metido en el cuerpo. Y así, sin parar.
Servidor, 2 segundos antes de tirar el micro a tierra.
Mi charla, un desastre por la improvisación , pero como saqué tortugas que se escapaban por la mesa, todo el mundo encantado. La única sin turno de preguntas, porque al llevar bichos se lió un pollo de 30 personas en el escenario para verlas de cerca. ¿Qué salió a escena? Un machito de Kinosternon baurii, uno de Terrapene carolina bauri, otro de Cuora flavomarginata, de Cuora amboinensis y una Rhinoclemmys que hubo que capturar en 3 o 4 ocasiones, y un par de juveniles de Clemmys guttata y Emys orbicularis.
Clara, secretaria de SOHEVA y Andy Highfield, del Tortoise Trust
Acabado esto, reparto de fotocopias y charla de Agostino Montalti, de su pedazo de viaje al centro de Ampijoroa en Madagascar, donde pusieron una valla electrificada para que no entrasen a robar las A. Yniphora. Y gracias a Vincenzo por traducir el turno de preguntas. Tras él, almuerzo y la charla de Andy Highfield. Im-presionante. No sólo por lo interesante sino por las virguerías que hacía con el ordenador, este hombre es todo un geek. Luego la charla más polémica, que yo creía que salíamos en las noticias, la de Juan Luis Castanedo, ya que algunos entre el público cuestionaron bastante los métodos de Global Nature en lo que se refiere al manejo de Testudo graeca provinientes de centros de recuperación, pero bueno, fue un debate fascinate del que creo que todos sacamos conclusiones.
Agostino Montalti (que pedazo de viaje se metió a Madagascar) y Vincenzo Acquaro de traductor.
Andy Highfield un segundo antes de apagar las luces.
Juan Luis Castanedo, responsable en Murcia de la Fundación Global Nature.
Tras ello, comida en el Pecat Diví, con todos los ponentes (Ya habían venido Manolo Merchán y Sebastián Bitón) y vuelta a la faena con Vicent Sancho y sus Emys y Trachemys, y la charla de Harald Artner, echando por tierra toda la clasificación taxonómica reciente del género Cuora. Para cerrar, César Ayres, que gran dicción y que tipo más optimista (con razón), y qué pedazo de informático lleva detro. Con el corazón encogido, un ratito de cervezas fabuloso con el susodicho y otros amigos, hasta la hora de cenar, en un bar de pueblo (por 10 euros, hasta las trancas) y hasta las n horas de nuevo.
Vicent Sancho, dos charlas seguidas, impresionante.
Harald Artner, y en español. Yo quiero ser él de mayor.
El descriptor de la Emys orbicularis agonica, César Ayres, mientras conseguía hacernos llorar a todos.
La hora de las cervezas, unos amigos: César, Santos, Johnny, Nacho y Harald. Al fondo, en la barra, Clara, Sebastián, Manolo...
Harald y Fernando.
César ante un auditorio más relajado.
Domingo con Manuel Merchán, Jesús Tomás (im-presionante), Sebastián Bitón y Fernando, con unas 60 - 70 personas que acabaron asistiendo. Regalamos libros, repartimos folletos.. de allí pocos se fueron con las manos vacias, cosa que hay que agradecer a los amigos de Chelonia, y también que ellos se encargasen de llevarlo todo ese día, que yo estaba derringlado.
Sebastián Bitón, como pez en el agua.
Comida en familia en el bar "Mediterráneo" y para casa.
Y todo, hasta el año que viene. A ver si no coincide con Terrasur, un accidente que en años venideros intentaremos subsanar entre todos...
Salu2
Contamos con asistentes de varias partes de España (recuerdo gente de Jaén, Madrid, Barcelona, Tarragona...) e incluso de Francia e Italia, ya que el elenco de conferenciantes no es fácil de ver incluso en los "Tagung" alemanes. Y en todo momento, pudimos intercambiar toda clase de experiencias, durante 48 horas y de forma muy intensa, con alguno de los mejores especialistas del continente europeo.
Bueno, pues allá vamos. La cosa empezó movidita, porque Andrea Franzoi acabó el viernes hospitalizado, y puesto que Andrea Luison tenía un problema laboral grave e incompatible con la jornada (su jefe lo había mandado una semana fuera), hubo que sustituir las dos charlas. Una de ellas se cambió por una de marinas el domingo, pero la de Franzoi, que era la que abría las jornadas, tuvimos que cambiarla por un conferenciante que estuviese a mano y fuera barato... pues yo mismo. Previamente, hay que decir que algunos conferenciantes ya llevaban por aquí desde las 4 de la tarde del viernes, por lo que ya llevábamos unas horas de vuelo que explican mi cara a la hora de dar la charla y que el micrófono estuviese más tiempo en el suelo que en mi mano.
Harald Artner y yo nos pasamos una tarde turística por Valencia, puesto que su hijo es un fan de la Fórmula 1 y él del tenis, me los llevé a ver la sede del Open 500 y el circuito Urbano, en especial el puente que cierra la bocana del puerto. Esas cosas de las que los oriundos nos pasamos echando pestes dia y noche porque se gastan los duros en eso en vez de en tenr buenos servicios, pero bueno, esto es así desde la época de los faraones y yo por poco lloro en la puerta de Abu Simbel. Pero a las 9 aparecimos todos en el Restaurante "El Pederniz", y estuvimos hasta la 1:30 pasándolo bomba, el dr. Artner, Agostino Montalti y Daniella, Filippo y Simona, Santos, Johnny, Jordi, Clara, Salva, Lola, Miguel Ángel Rivera, Miguel Ángel Ordovás, y un servidor, salimos doblados por todas partes. Me llevo a todo el mundo al hotel, paso a recoger a la 8 de la mañana siguiente, un frio que pela. Entramos, nos sentamos y empezamos las charlas, con el café calentito recién metido en el cuerpo. Y así, sin parar.

Servidor, 2 segundos antes de tirar el micro a tierra.
Mi charla, un desastre por la improvisación , pero como saqué tortugas que se escapaban por la mesa, todo el mundo encantado. La única sin turno de preguntas, porque al llevar bichos se lió un pollo de 30 personas en el escenario para verlas de cerca. ¿Qué salió a escena? Un machito de Kinosternon baurii, uno de Terrapene carolina bauri, otro de Cuora flavomarginata, de Cuora amboinensis y una Rhinoclemmys que hubo que capturar en 3 o 4 ocasiones, y un par de juveniles de Clemmys guttata y Emys orbicularis.

Clara, secretaria de SOHEVA y Andy Highfield, del Tortoise Trust
Acabado esto, reparto de fotocopias y charla de Agostino Montalti, de su pedazo de viaje al centro de Ampijoroa en Madagascar, donde pusieron una valla electrificada para que no entrasen a robar las A. Yniphora. Y gracias a Vincenzo por traducir el turno de preguntas. Tras él, almuerzo y la charla de Andy Highfield. Im-presionante. No sólo por lo interesante sino por las virguerías que hacía con el ordenador, este hombre es todo un geek. Luego la charla más polémica, que yo creía que salíamos en las noticias, la de Juan Luis Castanedo, ya que algunos entre el público cuestionaron bastante los métodos de Global Nature en lo que se refiere al manejo de Testudo graeca provinientes de centros de recuperación, pero bueno, fue un debate fascinate del que creo que todos sacamos conclusiones.

Agostino Montalti (que pedazo de viaje se metió a Madagascar) y Vincenzo Acquaro de traductor.

Andy Highfield un segundo antes de apagar las luces.

Juan Luis Castanedo, responsable en Murcia de la Fundación Global Nature.
Tras ello, comida en el Pecat Diví, con todos los ponentes (Ya habían venido Manolo Merchán y Sebastián Bitón) y vuelta a la faena con Vicent Sancho y sus Emys y Trachemys, y la charla de Harald Artner, echando por tierra toda la clasificación taxonómica reciente del género Cuora. Para cerrar, César Ayres, que gran dicción y que tipo más optimista (con razón), y qué pedazo de informático lleva detro. Con el corazón encogido, un ratito de cervezas fabuloso con el susodicho y otros amigos, hasta la hora de cenar, en un bar de pueblo (por 10 euros, hasta las trancas) y hasta las n horas de nuevo.

Vicent Sancho, dos charlas seguidas, impresionante.

Harald Artner, y en español. Yo quiero ser él de mayor.

El descriptor de la Emys orbicularis agonica, César Ayres, mientras conseguía hacernos llorar a todos.

La hora de las cervezas, unos amigos: César, Santos, Johnny, Nacho y Harald. Al fondo, en la barra, Clara, Sebastián, Manolo...

Harald y Fernando.

César ante un auditorio más relajado.
Domingo con Manuel Merchán, Jesús Tomás (im-presionante), Sebastián Bitón y Fernando, con unas 60 - 70 personas que acabaron asistiendo. Regalamos libros, repartimos folletos.. de allí pocos se fueron con las manos vacias, cosa que hay que agradecer a los amigos de Chelonia, y también que ellos se encargasen de llevarlo todo ese día, que yo estaba derringlado.

Sebastián Bitón, como pez en el agua.
Comida en familia en el bar "Mediterráneo" y para casa.
Y todo, hasta el año que viene. A ver si no coincide con Terrasur, un accidente que en años venideros intentaremos subsanar entre todos...
Salu2