Esto se pone interesante
@museta Lo más complicado de todo lo que dices es el tema de la responsabilidad, que va directamente ligado a la propiedad (no soy comunista, ojo jajajajajaja)
Ya te he dicho que está muy bien tu (vuestra) manera de tener a los animales, llámalo humanizar, llámalo japristencarcear, como prefieras, las connotaciones de mi vocabulario son feroces porque así quiero que sean, pero reaccionando así lo único que estás haciendo es darte por aludida en mis descripciones.
Yo el encarcelamiento lo he practicado también (aunque intento que sean espacios vastos), pero sólo con urodelos, anuros y demás especies forasteras por evitar escapes, debido al impacto que puedan tener en el medio, pero sólo por eso, no por los parásitos ni sustancias tóxicas desde luego. Ojala pudiera tener una parcela de ría acristalada para mantener especies extranjeras. De todas formas esto no es importante en comparación con el término responsabilidad, que veo que te gusta citarlo.
Pues aquí vamos, el tema de la responsabilidad, que quizá sea el malentendido más gordo a tratar para una mentalidad tan convencionalmente didáctica. Debes borrar la palabra responsabilidad. Yo, cuando compro, encuentro o entablo contacto con un animal, no adquiero ninguna responsabilidad, básicamente porque no adquiero la propiedad de ese animal (esto puede costar entenderlo, pero haz un esfuerzo por favor), simplemente deseo compartir momentos con él y observarlo, no soy su papi ni su mami ni su hermano ni su ciudador ni nada, sólo soy un espectador que desea ver a ese animal como el cámara que graba un documental. Le ayudaré si veo que se está muriendo, eso tenlo claro porque soy humano y a eso no puedo resistirme, pero si no se está muriendo trataré de que lo único que reciba de mi sean las condiciones mas cercanas a su medio natural y algún sobeteo y jugueteo.
Mi abuelo era el que gestionaba el tema de los animales, pero, muy a tu pesar, no cumplía ninguna ley, norma ni inspección porque ninguno de esos animales le (nos) pertenecía. Sé que esto te cuesta, pero insisto, haz el esfuerzo de entenderlo. Mi abuelo tenía una finca abierta en mitad de la sierra de Crevillente, abierta significa sin vallas. Un día aparecieron 2 cabras hembra sin collar ni firma ni nada, mi abuelo les dio una zanahoria a cada una y las cabras jamás se separaron de la finca hasta que murieron. Igual pasó con un poni que parecía perdido, el poni si que llevaba silla pero no tenía nombre, también tenía el trasero como fustigado en exceso por un lado. Igual, le dio de comer y no se separó de la finca jamás, de hecho compró una hembra a un vecino para que tuvieran miniponis, que fue y será la mejor "mascota" (libre y no encarcelada) que he tenido en mi vida. Las ardillas vivían en los pinos, eran más ariscas pero se te subían por el cuerpo y molaban un huevo. Así igual con las gallinas, los perros, gatos, etc. Pero ningún animal era suyo ni mio ni nuestro (aunque fuera comprado), eso siempre me lo dejó muy muy claro, y que cada animal es responsable de sí mismo mientras tú no lo prives de nada que pudiera disponer él en la naturaleza.
Busco consejos muy claros y detallados, y pocos contestan a lo que pregunto. La última cuestión era el ruido por las noches, lo cual ha sido imposible hasta que ha llegado
@pth con la alerta roja sobre el frio de la Siberia alicantina.
Sobre lo de la impronta he de informarte que es un tema muy frondoso y del que aun queda mucho por estudiar, aunque por lo pronto es más complejo de lo que tú has descrito. Hay improntas que se adquieren en cuanto se cierra la línea genética del bicho, hay improntas que no finalizan hasta los 3 años de edad y hay improntas adquiridas por ensayo y error (sobre todo en mamíferos y aves) gracias al mayor desarrollo encefálico que poseen. Eso quiere decir que si una cría se desteta prematuramente no está todo perdido, en absoluto, sino que ella misma es capaz de abrirse camino por el mecanismo de ensayo-error, sobre esto hay documentales a puñados. De todas formas, esto está fuera de lugar, no sé por qué te metes en estos líos si en mi jardín el único riesgo mortal (sí sí, mortal!) es comer plantas de la huerta ilicitana, a cual más venenosa, eso sí.
Pero bueno, lo más importante para que entiendas algo de esto es el concepto de responsabilidad y propiedad, que no están presentes en mis relaciones con animales, y en las de la mayoría de la gente sí.
Para tranquilidad o asombro de todos los escandalizados diré que mi novia está en último curso del grado en medicina veterinaria y apoya totalmente mi forma de ver las cosas.