Retomo este hilo (si no ha muerto) para aportar cosas interesantes ya que he leido practicamente todo lo que hablasteis y tengo un caso que me abruma entre manos
Todo el mundo sabe las cuatro mismas cosas del susodicho crypto pero yo quiero hacer una consideración ¿habeis tenido alguien experiencia con un animal que no sea un euble? Os cuento.
Tras una visita inproductiva a Granaselva (feria de exóticos pionera en Granada) llegué equipado con un precioso macho de tokay (siendo yo por aquel entonces un ser inocente desconocedor del origen de esta especie). Lo coloqué en un terrario del todo a cien (la caja guardatodo de los chinos
) como cuarentena y, dada su agresividad y vivacidad, lo tenia por sano. Lo único malo: su delgadez. Estaba muy flaco (no hasta el punto morboso de eubles con crypto terminal, pero flaco con ganas). El muchacho empezó su mala actitud por no comer y sufrir episodios de estrés (propio de un ser salvaje). La inapetencia y su flaqueza me llevaron a la alimentación forzada (error!). Tras un aparente éxito, vómitos y mierda diarreosa (heces poco consistentes me parece una cursilada) precedieron la muerte de la criatura en unos dias por claros síntomas de inadaptación. Durante el acontecimiento, fui lo suficientemente limpio de lavarme las manos después de tocar dos veces hasta el punto de que me dolia ya la piel (eso sí, con jabón de toda la vida). No obstante, en su llegada, el lagartijo corrio por toda la casa y no tuve tales cuidados (error!). También debo señalar que las heces eran malolientes y liquidas pero no tenian el color verdoso cryptodiano. Eso sí, detecté movimiento en ellas (tipo nematodo).
Fallecido el lagarto tan rapido y no presentando cosas "cryptosas" como un inchazón en el viente, pensé que muerto el perro se acabó la rabia. Mi indignación y odio visceral a los expositores se calmó tras un poco de publicidad negativa. Entonces aparece el segundo capítulo: Rubí, mi joven falsa coral que llevaba en proceso de muda durante toda la epopeya, estaba con dificultades para cambiar la piel ya desprendida (lo que achaqué a la sequedad por la subida de temperaturas) y se la quité. Hoy, al darle de comer, ha rechazado ratones descongelados, calentados, mutilados y vivos (ella es muy sociable y tiene una voracidad terrible normalmente). Esta sosa, hecha una rosquilla en un rincón del terrario, y me preocupa. Los demás animales no han mostrado síntomas pero, en general, son evolutivamente distantes (ranas, tritones, insectos palo, roedores..). Rex, como se llama mi gecko leopardo, está en otra habitación y no ha hecho nada raro aún. Ese euble es la joyita de mi colección, un regalo de un amigo de la infancia que es más dócil que una pogona con menopausia y ha venido conmigo desde al colegio hasta a lugares de lo más inimaginables. Sería horrible que muriese de crypto con la culebra
¿Qué opinais? ¿Se os ocurre que pueda ser algo distinto al crypto? He pensado en el veterinario pero los de aquí son de abrumadora incompetencia. Además, todos coincidis en el total desconcierto de los expertos y la dificultad para diagnosticar cryptosporodium. Además, sinceramente, confio más en la experiencia del pueblo del terrario. Y tampoco es que tenga la cartera como para tratamientos inútiles ni el reloj como para viajecitos absurdos (me juego entrar a la facultad en menos de un mes
) Agradezco cualquier opinión y espero que os sirva la experiencia.